Asesor Jurídico: ¿Por qué contratarlo?
La asesoría jurídica o legal es un servicio que presta un asesor jurídico ya sea para autónomos o sociedades. Por lo general, se trata de un abogado colegiado y con una especialización, aunque, también pudiera servir en tribunales para orientar a jueces y víctimas en casos que ameriten sus servicios.
En este perfil entrarían abogados de accidentes, abogados de divorcio, abogados de accidentes de trabajo, abogados criminalistas, abogados civiles, en fin, dependiendo de la naturaleza del caso.
En materia empresarial, las funciones de un asesor jurídico son bastante amplias. Pero, generalmente, se enfocan en orientar en los temas fiscales, mercantiles, administrativos y laborales. Siempre que stén estrechamente relacionados con la aplicación de reglamentos, normativas y leyes en estas áreas.
Asimismo, la ventaja de contar con este servicio es que facilitará la toma de decisiones. Asimismo, les asegura a sus dueños que no habrá inconvenientes legales que no puedan ser atendidos de inmediato y solucionados.
¿Cuándo es importante contar con un asesor jurídico?
La recomendación es contar siempre con el apoyo de un profesional en asesoría jurídica. Sin embargo, hay casos en específico en los que más que nunca es imprescindible que forme parte de la gestión de una empresa y son los siguientes:
1.- Al constituir una empresa
Si la idea de una compañía está en ciernes, lo mejor es contratar el servicio para no ser víctima de la inexperiencia. Las empresas nuevas necesitan contar con el apoyo de un entendido en leyes vigentes para prevenir inconvenientes. Asimismo para poder resolverlos de forma ágil y eficaz, al tiempo que se solidifica la seguridad jurídica de la compañía.
Por otro lado, un asesor jurídico sabrá cuáles y cómo deben cumplirse los requisitos legales necesarios para llevar a cabo la estrategia comercial que se tiene pensada para dicha empresa y aumentar su rentabilidad paulatinamente.
2.- Al declarar
Por desconocimiento, se pueden cometer errores graves y penados por la Ley. Con un asesor jurídico al frente, se cuenta con orientación (y a veces gestión) en lo que se refiere a obligaciones fiscales y tributarias.
3.- Al necesitar asesoramiento personalizado
Cada empresa es distinta y tiene necesidades diferentes. A pesar de que se trate de un mismo rubro, la forma de operar entre una y otra puede variar. Así como la estructura interna, el tipo de contratación, etc.
Es por ello que, puede surgir un sinfín de inconvenientes que no necesariamente están reseñados en los libros. Por tanto, la interpretación y criterio de un asesor jurídico es clave en las empresas, pues son quienes pueden estudiar mejor cada caso y ofrecer soluciones específicas según lo que se necesite.
4.- Al contar con mucho personal
Mientras más grande sea la plantilla, más trabajo legal conlleva, de modo que una asesoría jurídica es necesaria para llevar al mínimo el margen de error en cuanto a materia laboral, especialmente teniendo en cuenta que la leyes, reglamentos y normativas en este ámbito cambian constantemente.
5.- Al querer expandir el negocio
Si, por ejemplo, quieres aumentar el alcance de tu compañía por medio de un sistema de franquicias, es importante contar con un asesor jurídico para que revise los contratos y te ponga al corriente de las garantías y obligaciones que se tienen en este tipo de convenios.
En definitiva, contar con la orientación de un asesor jurídico es indispensable si no eres experto en leyes. Pues, cualquier movimiento debe ser aprobado por alguien preparado para ello. De modo que, quedes tranquilo al dejar la gestión en un profesional que puede prevenir inconvenientes o ayudarte a salir de ellos.